CARMELO URSO INCLUIDO EN
ANTOLOGÍA DE MICROLITERATURA “OTOÑO E INVIERNO” DE EDITORIAL ESPAÑOLA
“DIVERSIDAD LITERARIA”
El
escritor caraqueño Carmelo Urso resultó seleccionado para ser incluido en la
antología “Otoño e Invierno” de la editorial española “Diversidad Literaria”
(http://www.diversidadliteraria.com/), tras darse a conocer el veredicto del I
Concurso de Microcorrelato “Otoño e Invierno”.
En dicha justa participaron más
de 4 mil escritores, con obras de una extensión máxima de 5 líneas, escritas en
castellano, en letra Arial tamaño 12. El ganador del concurso fue el español
Agustí Olivares. Carmelo Urso resultó seleccionado por el texto “El niño del
otoño y del invierno”.
El licenciado Carmelo Urso es
comunicador social egresado de la Universidad Central de Venezuela (UCV). Nació
en Caracas en 1969. Tiene 20 años de experiencia en la dirección y coordinación
de unidades de prensa y relaciones públicas. En materia periodística, ha sido
acreedor de los premios municipales de Chacao (2000) y Vargas (2001). En el
área literaria, ha sido finalista (2009) y ganador (2010) del Concurso
Internacional de Cuento y Poesía Breve “La Librería Mediática” (Venezuela), así
como ganador del concurso “Microficciones” (Argentina, 2010) y el Concurso de
Cuentos de la Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez (2013).
Urso regenta desde hace años los
blogs “En Tiempo Presente”http://carmelourso.wordpress.com/ que versa sobre
temas de cultura de paz, salud y espiritualidad y “Sólo50”
http://solo50.wordpress.com/especializado en microliteratura. Ha dictado
Talleres de Microliteratura en el Colegio Universitario de Caracas (CUC) y
PDVSA La Estancia, donde fungió como Jefe de Prensa durante siete años. Este
año abrirá una escuela de escritura online cuya apertura será anunciada
oportunamente.
Más allá de Barrera Oscura, a velocidad luz y
desde una galaxia con forma espiral, un
pensamiento azul comienza a llegar:
“Estuve sola tanto tiempo que parecía una
eternidad. No pude más y comencé a dividirme. En poco tiempo resultaron mil partes de mí. Luego más y más.
Así cubrí el planeta con millones de
Especies. Desaté el sexo y ofrecí múltiples estructuras fisiológicas
para mi creación
especial, el cerebro. Una
especie cerebral, Homo sapiens, comenzó a pensar con lógica y
me revolucioné. Ahora estoy confundida, expectante, dubitativa. Esta parte humana de mí entra en adolescencia y
comienza a rozar enorme poder, casi divino. Tiene ya suficiente como para
destruir la Tierra en mil pedazos y
acabar con toda la vida natural que somos. También es verdad que con este poder podría expandir la
vida natural po el Cosmos y ofrecer inmortalidad a ella
misma, que también soy yo. ¿Qué hará la Humanidad?, aquí mi duda y confusión. Necesito que el Hombre
consiga establecer una unión consciente,
global e inteligente conmigo, con él mismo y con el resto de las Especies. El oído global de
los humanos ya
se ha formado
y pueden escuchar en tiempo real
cualquier mensaje. Espero que si la evolución mental continúa
también pronunciará su Voz global y todos
conoceremos la decisión
de la Humanidad.
Entonces sabremos el
futuro que nos aguarda a todas
las vidas de
este planeta. Continúo esperando.”
Más allá de Barrera Oscura, donde el Cosmos
parece sin vida, una Joya Azul
crece y se
reproduce sin cesar.
Parece que tiene
motivo, incluso puede
tener consciencia. En un Universo que parece vacío algo vivo quiere
llenarlo.
“Aun un espacio concebido para
permanecer a oscuras debe tener la luz suficiente proveniente de alguna
misteriosa abertura que nos muestre cuán oscuro es en realidad”.
Me pregunto si Dante Alighieri se hubiese inspirado en Beatriz para escribir su Divina Comedia si viviera en nuestros tiempos. Acelerados tiempos estos en los que las relaciones humanas han sufrido una metamorfosis que, realmente no sabemos, si sigue la teoría de la evolución o por el contrario, estamos en plena involución.
Beatriz Portinari ha pasado a ser
eterna gracias a ser la musa o inspiración de Dante. A ella, a lo que inspiró
en el poeta, se deben sus obras más
conocidas, La Divina Comedia y Vida Nuova.
Beatriz representaba para Dante el amor cortés, el amor sublime. Existen muchas referencias
históricas sobre la existencia o no de esta dama. Algunos historiadores narran
un primer encuentro cuando ambos contaban con tan solo nueve años. Estos mismos
dicen que hubo un segundo y último encuentro nueve años después y que esto
bastó para que ella se convirtiera en la musa del escritor. Otros historiadores
confirman estos dos encuentros aunque,
sus familias vivían en la misma callejuela donde hoy se puede visitar la casa
de Dante. En menor cantidad, los hay quienes creen que Beatriz nunca existió,
que fue el resultado recurrente de la inspiración de Dante.
Habiendo ocurrido o no lo que
cada historiador cuenta, no podemos olvidar que estamos ubicando los hechos en
el siglo XIII. Hay referencia de ella hecha por Bocaccio, que la describe como
una gentil dama con facciones tan delicadas como las de un ángel. Conociendo la
literatura de este autor, orientada en
su mayoría hacia la lujuria, es de estimar el respeto que la dama inspiraba en
este para describirla de tal manera. Realmente no se sabe con certeza si la historia que se cuenta de
ella es auténtica pero, de ella se describe un matrimonio y seis hijas.
Cualquiera podría pensar que siendo la moral de las damas tan cuidadosamente
vigilada en aquel tiempo, podría verse afectada al saberse que una señora, de
las principales familias de Floréncia, era la devoción del poeta. Sin embargo,
no fue censurada por los hombres de aquel tiempo que consideraron La Comedia
como una gran obra. Esto ocurrió así,
porque Dante al igual que muchos poetas del Stil Nuovo, sublimaban lo que se
conocía como “El amor cortés.
Dante Alighieri cantó a su musa
como cualquier trovador cantaba las penas del desamor y la ilusión del amor platónico. Entonces, ¿escribiría hoy el poeta sus grandes obras inspirándose en
una musa creada por su inspiración o por el recuerdo de un solo encuentro?
¿Escribiría hoy Dante inspirado por el amor surgido hacia una persona a la que
nunca ha visto, con la que nunca ha hablado, a la que nunca ha escuchado? Tal
vez si. La inspiración no es más que el
resultado de una necesidad de crear, movidos por un sentimiento que, en la
mayoría de los casos, no entendemos.
Dando un paseo por las redes
sociales, nos podemos encontrar con gran cantidad de gente que, manifiesta esa
necesidad escribiendo maravillosos versos o prosa. En muchos casos, y al igual
que Dante, la inspiración es proporcionada por situaciones intangibles y un
tanto etéreas. Las redes sociales han resultado un medio eficaz para volcar esa
inspiración. Para muchos, esto no pasa de ser un romanticismo trasnochado y
pueden llegar hasta a ridiculizar a sus autores. Existe respeto por los versos
escritos por grandes poetas de renombre, se glorifican los versos de los
lejanos trovadores pero, se cree que son letras que no tienen cabida en
nuestros tiempo. Las musas o, si se
prefiere, la inspiración, necesita ser canalizada, con más o menos acierto
pero, se vuelca procurando alivio a su autor en cada verso.
Conocemos los sueños de Dante
y Beatriz será por siempre eterna,
porque la inspiración habitó en el alma de un poeta y él, magistralmente los
narró y los dejó a la humanidad como legado.
Soy
persona muy dada a las frases positivas, de autoayuda, motivación y demás…. básicamente
porque yo positiva, cero patatero y me sirven de pequeño empujoncito para ver
las cosas con un tono más llevadero que el triste negro de siempre. Pero claro que hay días que ni el mismísimo
Buda rodeado de toda la paz y el amor del mundo lo arreglan.
"Be water my friend" o en españolito
"sé agua amigo mío" ¿Agua? Pues esta frase leída el día que te han
devuelto el recibo como poco te dan ganas de estrangular a alguien ¿Cómo voy a
ser agua si como me descuide me la cortan?
"Si la vida te da
limones hazte una limonada"… limonada…
ya... ¿lleva agua? Pues no hay limonada, cojo los limones y se los estrello a
quien se tercie...
"No hay mayor
desprecio que el no hacer aprecio" ¿perdona? Y, esto lo leí por ahí, y lo a gusto que te
quedas mandando al cuerno al sujeto en cuestión.. Que sabio Fernando Fernán Gómez con su "a la
mieeeeeerda" lo que disfrutaría el hombre…
"No tengo tiempo de
odiar a los que me odian, estoy muy ocupada amando a los que me aman” esta es buenísima, que no tengo
tiempo dice... Si no lo tengo lo busco, que hay días que odio a gente que ni
conozco, así, sin miramientos.
O
la de "Cuando una puerta se cierra
se abre una ventana", pues hay momentos que ni puertas ni ventanas, ni un triste
agujerillo por donde entre la luz (que no descarto que me devuelvan el recibo
también). Así que como comprenderéis,
hay veces que las buenas intenciones, las actitudes positivas sencillamente no
valen para nada.
“Vacía
tu mente, se amorfo, moldeable, como el agua. Si pones agua en una taza, se
convierte en la taza, si pones agua en una botella se convierte en la botella,
si la pones en una tetera se convierte en la tetera. El agua puede fluir o
puede aplastar. Se cómo el agua. Amigo mío, el agua que corre nunca se estanca,
así es que hay que seguir fluyendo”.
Sentada frente al espejo paseaba
el cepillo por su larga melena, suavemente, deleitándose, esperando lo que
vendría a continuación. Él se acercaría a ella muy despacio, hundiría la cara
en su nuca, aspirando aquel olor mezcla de piel y cabello, que sabía le
enloquecía. Muy despacio, le quitaría el cepillo de la mano y entonces sería él
quien la peinaría con tanta ternura y delicadeza, que convertiría aquel acto,
como siempre, en una liturgia. Sus manos, tan firmes y tan cálidas se posarían
en sus hombros y lentamente irían deslizando los tirantes de su camiseta hasta
dejarlos desnudos. Sería el momento en el que ella comenzaría a notar la
tibieza de aquellos deseados labios. Marina sentía como su cuerpo temblaba sólo
con recrear la escena.
Las sábanas se convertían en las
serenas cómplices de sueños y fantasías donde concluían aquellas entregas
llenas de un indescriptible calor.
Entrar en sus ensoñaciones se había convertido en un momento de gran
placidez. La hacían sentir latente, viva y llena de un dulce regocijo. Notaba
como su cuerpo lentamente se hacía más firme, más sensual, deseosa de que nunca
llegara el final. Aquel momento que, era solo suyo y lo iba adornando un poco
más en cada uno de los encuentros. El final
era volver a la realidad y nuevamente aceptar que solo era su fantasía y él, solo un espejismo.
Sabía muy bien como había
comenzado toda esta locura de la que se sentía incapaz de escapar, cuando, no
lo podía precisar. Aún siendo una voraz lectora, muy pocas veces había leído
alguna novela romántica. Le gustaba más otro tipo de género que le despertaban
curiosidad y la precipitaban a la búsqueda de datos para ampliar información.
Una tarde, en una divertida conversación con sus amigas, una de ellas comentó
que estaba enganchada a la lectura de pequeños relatos que alguien publicaba en
una página Web. La curiosidad, esa, a veces incontrolable curiosidad, la llevó
a indagar sobre lo que había oído. Desde el primer relato que leyó se quedó
prendada de aquellas historias tan bellamente narradas, todas llenas de una
magia y una sensualidad envolventes que captaban la atención de cualquier
lector. Todas ellas, escritas por una misma persona de la cual, Marina pronto
empezó a dibujar en sus fantasías de acuerdo a todo lo que le iban inspirando
sus historias. Comenzó a entrar en aquella página, ya no por las historias,
sino por quién estaba detrás de ellas, por el escritor.
Así fue como nació la fantasía
que no tenía fecha de comienzo pero, que la estaba llevando a la convicción de
que tendría que darle fecha para sacarla de su vida. No podía echarle la culpa
a su soledad, porque nunca ese estado le había afectado en su vida diaria o tal
vez si, y era ahora cuando la estaba acusando al darse cuenta de la cantidad de
sensaciones que tenía aparcadas desde hacía mucho tiempo. Sabía que tenía que
ir desechando de su vida esta fantasía e intentar volcar todo ese deseo fuera
de los sueños, despierta. Esto lo pensaba mientras transcurría su día de
trabajo y se relacionaba de forma normal con compañeros y amigos. Aunque no
podía evitar estar pendiente de las nuevas historias que iban surgiendo de las
manos de aquel ser que la tenía fascinada. Se prometió a si misma abandonar
aquellos encuentros tal y como se producen las rupturas entre dos personas que
han vivido un gran amor pero, que saben que irremediablemente se tienen que
separar.
Dejó de buscarle, dejó de leerle
durante algunos días. Lejos de sentirse más aliviada y conseguir alejarse de su
fantasía, eso le producía una angustia que por momentos le resultaba
insoportable. Sentía que él la llamaba y ella necesitaba de su proximidad, de
aquellos encuentros. Le buscó de nuevo, leyó su última historia, cerró los ojos
y comenzó a pasear el cepillo por su larga melena…
"Si, mi amor es así, como un
torrente, como un río crecido en plena tempestad, como un lirio prendiendo
raíces en el viento, como una lluvia íntima sin nubes y sin mar"
Voy a violar a una de mis leyes.
Porque no creo en los seres malos y es una ley en mi personalidad ética.
Referente al mal creo que existen las ideas malas, los pensamientos malos, los
sentimientos malos, las acciones o aplicaciones malas (esto lo cubre la
Justicia y sus tribunales) y en las enfermedades malas (de la psique), pero no
creo en los individuos malos, absolutos o por naturaleza. Siempre trato de
evitar señalar a una colectividad y decir que ellos son malos, o que son los
malos; pero este post va a ser una excepción para esta situación extrema... de
extrema pobreza para millones de ciudadanos. Los malos para nuestras sociedades
democráticas son los neosofistas. Y una vez auto violada mi ética, en este
sagrado momento de mi moralidad pública, iniciaré una reconciliación,
procurando el método y la razón. Primero, ¿quiénes son estos nuevos sofistas?,
¿quiénes fueron, al menos, los primeros sofistas?
Entramos en la Antigua Grecia
(siglo VI a. C.), una época de oro para el pensamiento humano, de ella emana el
conocimiento llamado occidental, antes de fundirse con el conocimiento global
que todos los humanos y nuestros pueblos están generando en la actualidad. Por
lo tanto también es importante la Antigua Grecia para la sabiduría general
humana de hoy en día. Estamos ante el Logos (la razón) intentando hacer frente
a las supersticiones y en muchos casos a las tradiciones, e incluso ante la
religión, buscando un mundo más justo a través de la lógica y la razón. Pero
éstas trazaron varios caminos y muchas filosofías nacieron en aquella época,
muchas vías del conocimiento iniciando sus primeros pasos, y pasos firmes, con
sólidas teorías y argumentos. La explosión filosófica dio vida a muchas
ciencias, muchos grupos iniciando nuevas disciplinas del conocimiento y muchas
escuelas filosóficas. Pero si entre todas estas colectividades buscásemos
individualidades hay una crucial: Platón. Individuo clave, sobre todo si
buscamos a Sócrates y a los sofistas.
Platón (427-347 a. C), además de
ser unos de los mejores filósofos de la Antigüedad, es una fuente, a veces la
única, de otros excelentes filósofos de la Antigüedad, y de otras corrientes o
escuelas filosóficas, como la de los sofistas. En la historia escrita Platón es
el primero en mencionar a los sofistas (en una de sus odas). De igual manera
que gracias a Platón sabemos sobre Sócrates (470-399 a.C.), su maestro y
posiblemente el mejor filósofo griego. Y así sabemos que los conocimientos
sofistas se enfrentaron a los conocimientos socráticos y al mismísimo Sócrates.
No está probado, pero aún como hipótesis, aquello que nos cuenta la Historia (o
Platón) de los sofistas y de Sócrates sirve para comprender mejor a la
deficiente filosofía aplicada en las actuales sociedades públicas. Merece la
pena que intentemos saber cómo mejorarlas, y en esta ocasión, sólo con conocer
o repasar este pasaje histórico ya casi sabríamos cómo. Veamos.
Los sofistas buscaban de la
filosofía principalmente dos de sus virtudes, la oratoria y la dialéctica, y
las trataban como herramientas de persuasión para construir sus objetivos. Por
ello “sofista” vino a significar maestros o “profesionales de la sabiduría”. Y
aunque la oratoria y la dialéctica pueden tener mucho de ética, los sofistas
las utilizaban más como estética, más para favorecer el éxito personal o
privado que para mejorar la situación pública, o degenerando hacia ello. Pero
ni siquiera era estética de su propia ética, sino de la ética del mejor postor,
por lo tanto y en muchas ocasiones era la estética como fachada o disfraz de un
interior real muy diferente o incluso contrario. Donde se presenta una ética
ante los medios o espacios públicos pero en realidad se está tramando o
aplicando otra. Bien es cierto, y para no dejar sin abogado a los sofistas, que
esto ocurrió cuando el movimiento degeneró y abiertamente buscaban el prestigio
intelectual, social, político y económico mostrando un escepticismo y un
relativismo que a la larga resultó insultante.
Antes, en mejor época para el
sofismo, el sofista era bien mirado socialmente, cumplía su labor ofreciendo una imagen cultivada e intelectual del poder, apareciendo con agradable carisma
hacia la población o ciudadanía (de hecho el mismísimo Pericles tuvo consejeros
sofistas). Pero el movimiento sofista degeneró, el lujo se convirtió en vicio,
corrupción y perversión. Todo valía hacia el éxito personal y la riqueza
particular, éstas eran las metas filosóficas de unos maestros sofistas que
sabían mucho. Sabiduría al servicio de la riqueza económica, del poder político
o del éxito jerárquico, del mejor postor. Y todo esto ocurriendo ante las
narices de Sócrates, el gran Sócrates, el cual propugnaba por una filosofía
para la instrucción intelectual y moral del hombre en la búsqueda y
conocimiento del bien colectivo y de la justicia. Sócrates fue el encargado de
parar los pies filosóficos a los sofistas... Aunque al final le costó la vida
(fue condenado a muerte o exilio, y eligió muerte).
La guerra intelectual quedó
servida ante la mirada pública. Los sofistas eran poderosos en los discursos,
Sócrates era imbatible en los diálogos. Los sofistas “hipnotizaban” a los
jóvenes con excelente oratoria y dialéctica, eran captadores. Sócrates
utilizaba la ironía con sus preguntas, llevando al interlocutor frente a su
propio conocimiento y ante la siguiente duda. Y entonces, con una pregunta
nueva, desafiaba a dar un paso más allá en la reflexión lógica. Con esta
mayéutica o tratamiento no ofrecía el concepto, sino que dejaba que su
interlocutor creara el concepto en su mente por iniciativa propia (aunque
inducida). Sócrates no ofrecía conocimiento, lo sembraba. No enseñaba a nadar,
dejaba al pupilo o al interlocutor en el agua, y él por sus propios medios
aprendía a nadar. Los sofistas, además, cobraban por dar clases a los jóvenes,
Sócrates no. Los sofistas ofrecían conocimiento con carácter relativo,
otorgando al propio conocimiento un valor dudoso. Sócrates no copiaba
conocimiento, un hombre no era un libro copiado, recreaba el conocimiento en
otras mentes y las dejaba partir, libres, pero más capacitadas en la búsqueda
del bien, particular o común.
La humildad de Sócrates era
aplastante: “sólo sé que no sé nada”, decía. Y posiblemente la cita más famosa
del sofismo sea “todo es relativo”. Para mí esta cita me sirve como puente
hacia el mundo del sofismo, una licencia para saltarse todo, para justificar
cualquier medio o violar cualquier ley. Otorgando a ciertos males comunes unos
valores insignificantes mientras el valor particular del que observa esté
rodeado de lujos y poder. Menos mal que la famosa cita es un puente muy frágil,
con un leve soplo de lógica podemos barrerlo. Pues “todo es relativo” supone
una contradicción, porque equivale a manifestar un absoluto, una verdad
absoluta, entonces: TODO NO ES RELATIVO. En cambio se podría decir “Todo es
relativo, salvo esta afirmación”, estableciendo entonces una afirmación no
relativa, sino absoluta. Espero o creo que quede claro, decir que "las
verdades absolutas no existen" es pretender establecer una, por lo tanto
es contradictorio, sin valor lógico, de igual manera sería decir que todo es
relativo.
Sin embargo, y es curioso, si
dijésemos lo contrario no habría contradicción. Si dijésemos “todo es
absoluto”, podría o no ser verdad, pero la frase no tendría contradicción,
estaría bien construido el mensaje. Si invertimos el signo cambia la fórmula.
Pero este post no es para profundizar en la filosofía, sino para que emerja
entre las sociedades actuales. Porque me temo que estamos padeciendo sofismo o
neosofismo en el poder político y, como consecuencia, en el económico. Ambos
poblados de neosofistas vendiendo una ética pero aplicando otra, un claro abuso
de la moral pública y de la política ciudadana. Y claro, con un poder político
infectado, con ramificaciones a todo lo público, se transmite y se infecta
mucho más, llegando a muchas instituciones de los tres poderes (democracia) y
en todos los campos sociales o ministerios, como sanidad, educación, economía
pública, servicios sociales, empleo, jubilación... ¿Nos suena?, sí, tal y como
está pasando ahora en España y en otros países. Por ello, al toparme de nuevo
con los sofistas, he comparado con la actualidad y me he asombrado, parece
calcado a la filosofía, al menos a la ética, que los poderes públicos aplican
en la actualidad para detrimento del bien común. Qué lástima no tener
pormenorizado aquella época aún aceptando sinceridad en Platón. Pero podemos
hacernos una idea o respuesta si preguntamos cómo actuaban los sofistas.
Buen verbo para el tema sofista,
actuar, acción y/o interpretación, actores, técnicos en la representación y en la persuasión. Es tan efectivo el sofismo de la actualidad o neosofismo que ha
sabido permanecer oculto en tiempos de bonanza económica, pero ahora, como los
pueblos sumergidos de los pantanos, aparecen a la vista al bajar la economía a
niveles de pobreza severa para millones de ciudadanas, ciudadanos y sus hijas e
hijos. Ahora se les ve claro, son los sofistas, utilizan la política pública y
las empresas privadas para obtener el placer y el poder de hacer lo que quieran
mientras los demás, la gran mayoría, resultamos impotentes. Obviamente para
ellos la democracia es relativa, tanto que pueden reformar la Constitución en
una reunión de despacho y encima decirle a la cara a la Ciudadanía que eso es
democrático... y no puedes hacer nada hasta la siguiente legislatura. Son
capaces de matar a la democracia y presentarla como si estuviera vivita y
coleando.
Los sofistas del siglo XXI se
agrupan en torno a dos ocupaciones muy ligadas entre sí, la política pública y
la empresa privada. Son políticos o empresarios, pero se turnan, es decir, a lo
largo de sus carreras son políticos y empresarios (al menos dentro de empresas
o multinacionales con cargos de responsabilidad). El ciclo se completa cuando
los sofistas/políticos obtienen el poder público y comienza el reparto del
presupuesto del Estado entre empresas privadas afines a ellos (bien por ser de
amigos, de familiares, o apalabradas). Y por supuesto el ciclo mayor se produce
con sofistas/empresarios de mucho poder en grandes empresas o multinacionales.
Que después de recibir mucho dinero ciudadano por adjudicaciones de obras o
contratos públicos suelen ofrecer cargos a los sofistas/empresarios cuando se
retiran de la política (se les contrata sin saber mucho qué van a hacer, supuestamente
de consejeros o asesores, pero cobrando un pastón). En síntesis comparativa es
como la cadena de transmisión entre los dos piñones de una bicicleta, un piñón
es el sofismo/político y el otro el sofismo/empresarial, y la cadena es el
dinero público.
Y para llegar al dinero público
es necesario el poder público, que sería la fuerza que mueve los pedales de la
bicicleta para que los dos piñones sofistas se nutran de dinero ciudadano, con
mucha más cantidad del que merecen por lo que hacen o supuestamente hacen en
esos contratos o adjudicaciones. Sin poder público (piñón político) la
bicicleta sofista se detiene, he aquí el centro de la diana para el arquero
neosocrático. Porque creo que necesitamos un nuevo movimiento socrático en este
siglo XXI, si no lo hay habría que crearlo, si lo hay, hay que apoyarlo hasta
que llegue al poder sin que importe la tendencia política y democrática que
gobierne. Sin duda una ética política de marcado carácter socrático nos traería
a todos un bien común mucho mejor al actual o sofista. De hecho, cualquier
ética donde predomine el bien común democrático es mejor a la actual ética
sofista. No es sólo una cuestión de gustos o preferencias éticas, sino de
justicia. Pero la ética y la justicia están muy ligadas, y el poder público o
político conlleva el poder legislativo (y a la capacidad de indultar),
entonces, ¿qué ética presentan los sofistas como fachada?, otra pregunta clave.
Los sofistas son o pretenden ser
profesionales de la persuasión y sin reglas (“todo relativo”, entre comillas por incierto), es decir, utilizan todo lo que tengan a mano, cualquier
ideología democrática les vale. Por ello hay sofistas en la llamada derecha
política y hay sofistas en la llamada izquierda. Aunque un partido democrático
de una ideología pura llegue al poder público, casi al instante recibirá el
asalto de los sofistas, es más, posiblemente ya los llevaba antes de llegar al
poder. Pues están camuflados en todos los grandes grupos económicos o
políticos, dispuestos a casi todo para ir escalando poderes y riquezas,
utilizando una fachada aparentando que se está actuando por el interés general.
Tanto es así que con el último gobierno del socialista Zapatero se consiguió el
respaldo político (reforma de la Constitución española) que tanto necesitaban
los sofistas internacionales. Y con este primer y ojalá único gobierno del
conservador Rajoy el sofismo inunda todas las actividades económicas y
públicas. Se venden empresas públicas como si toda empresa pública conllevara
necesariamente pérdidas. Se están repartiendo las propiedades y los patrimonios
ciudadanos recortando los derechos sociales y civiles con nuevas leyes que
dificultan las protestas colectivas y el acceso a la justicia necesaria.
Incluso se está modificando el Código Penal para penar algunos de los derechos
civiles, políticos y sociales reconocidos internacionalmente.
En esta analogía entre el sofismo
en tiempos de Sócrates y la actualidad, española o europea, incluso mundial,
hay que cambiar algo de la Historia. Sócrates no debe ser condenado a destierro
o muerte. Esta vez Sócrates debe vencer. Pero cómo, qué hizo Sócrates, dónde
erró ¿o no erró?, ¿fueron vencidos los sofistas por Platón el discípulo de
Sócrates?, ¿o por Aristóteles (discípulo de Platón)?, ¿cómo?. Porque
necesitamos saber cómo vencerlos en esta nuestra época histórica. Ojalá
podamos, no sólo profundizar en esta historia pasada, también en la reflexión
para hallar los puntos débiles de este neosofismo político y económico. Sin
duda nuestras sociedades y ciudadanías democráticas mejorarían esta época que
está viviendo o, para la gran mayoría, padeciendo. Por mi parte intentaré
hacerlo y escribir un post al respecto con los resultados. Y si alguna lectura
del presente post quiere colaborar, por favor, a su disposición queda este blog
y sus comentarios. Gracias.
"Pero la época de la caballería se ha ido. La de los sofistas, economistas y calculadores ha triunfado, y la gloria de Europa se ha exitinguido para siempre".
La tragedia se respiraba en el
ambiente, una vez sabido que la luna iba
a efectuar su aterrizaje en la Tierra. Todos los conocimientos tambaleándose, la Luna cabía en un campo... ya nadie más iba a pisarla
visitándola en cohete, ni se iba a reflejar en los ojos de los enamorados.
Autor: Xavier Bertran
"La luna, como una flor en el alto arco del cielo, con deleite silencioso, se instala, y sonríe en la noche".
Esa mirada gélida e impenetrable, esos ojos azul eléctrico, desafiantes y amenazadores,
que eran el escudo perfecto para esconder aquello que no quiere mostrar a nadie….
Aparcó el coche delante de la oficina bancaria, sería el encargado de solventar
el agujero negro que había dejado su antecesor a causa de las aberrantes operaciones inmobiliarias realizadas y como pago a su nefasta gestión había
obtenido un ascenso en su carrera junto a un más que generoso sueldo nada
merecido. Él sabía que ese destino era un castigo por no cumplir los objetivos de
ventas de productos financieros basura y por conceder créditos los pequeños
comerciantes del barrio para evitar que éstos tuvieran que cerrar sus puertas; el hecho que la tasa de morosidad de su
oficina fuera de las más bajas, nunca se tuvo en cuenta.
Al entrar por la puerta, todos los empleados sabían quién era; todos
desviaban la mirada al ver aquellos ojos azul eléctrico. Enseguida notó el
miedo y el nerviosismo en cada uno de ellos, la palabra ERE corría como la
pólvora por todas las oficinas. Se presentó y saludó a cada uno de sus empleados
de una forma fría e impersonal. Le enseñaron donde estaba su despacho y se
dirigió a él cerrando la puerta. Se sentó en la silla y encendió el ordenador
para mirar el plan de trabajo del día. No había traído ningún objeto personal
para romper la monotonía y la frialdad de la decoración, sabía que no iba a
estar mucho tiempo allí.
La primera visita que tenía programada era una pareja de treintañeros,
ambos con un trabajo solvente. Miró su
expediente, impago de un crédito para realizar un viaje alrededor del mundo, otro para la compra de un vehículo que
el mismo no podía pagar y la hipoteca de una majestuosa casa con un precio
desorbitado con unas cláusulas abusivas que sólo un idiota mal informado
hubiera firmado. Hizo sus cálculos, y después de comprobar que podrían vivir dignamente sin el derroche y despilfarro que hasta hace poco habían llevado, puso su expediente en la pila de ejecución hipotecaria, haciendo caso omiso a sus lloros, súplicas
y lamentos.
Su segunda visita era una mujer que tan sólo hacía un año que se había
jubilado, y de su pensión vivían ella, su hijo, su mujer y sus dos nietos que
sufrían la plaga que invadía el país… el paro. Su pecado, avalar a su hijo en la compra de un pequeño piso exageradamente tasado, con el consentimiento del banco. La dignidad y la
serenidad con que la mujer expuso su caso casi rompe su armadura en forma
de fría mirada azul; y en ese mismo momento supo que accedería a la
solución por ella planteada, la dación en pago de la vivienda en la cual podría seguir habitando a cambio del pago de un alquiler
social.
La tercera visita era el propietario de una pequeña empresa de servicios de
mantenimiento y limpieza. Y recordó donde había visto el nombre de la misma, en
los uniformes de los empleados que realizaban la limpieza del polideportivo
municipal al cual acudía tres veces por semana. Escuchó atentamente las
explicaciones nerviosas del empresario del porque necesitaba una ampliación de
su póliza de crédito. Examinó la documentación presentada y observó que las
dificultades de financiación de la empresa se debían a la falta de pago por
parte del Ayuntamiento de las facturas surgidas por el contrato de servicios firmado por ambas partes para la limpieza del polideportivo. Además de acceder a
la ampliación de la póliza de crédito, llamó a un amigo suyo que formaba parta del
equipo de gobierno municipal para ver si podía desencallar el pago de dichas
facturas.
Y llegó la hora del fin de la jornada laboral, y hubo una desbandada
general, tampoco los podía culpar de nada, nadie les iba a agradecer ni pagar
las horas de más efectuadas. Él se quedó un rato más para acabar la
documentación necesaria respecto a las decisiones hoy tomadas. En cuanto subió al
coche se quitó la corbata y condujo en dirección a su casa. En cuanto abrió la
puerta esa mirada gélida se transformó en otra vivaz y llena de alegría al ver
aquel niño de tres años que corría con los brazos en alto en busca de un abrazo
al grito de papá. Su mujer lo estaba esperando con una sonrisa radiante pintada
en la cara y le dijo: “Lo has conseguido”. El trabajo de contable en aquella
pequeña empresa era suyo. Sus ojos azul eléctrico siempre desafiantes cambiaron
a una tonalidad azul celeste que
detonaban la serenidad y tranquilidad que de repente sentía…. La felicidad rara vez depende de acumular más y más riqueza.
"¿Que hace falta para ser feliz? Un poco de cielo azul sobre nuestras cabezas, un vientecillo tibio, la paz del espíritu".