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jueves, 22 de enero de 2015

El mito de Narciso


El poeta romano Ovidio en su libro Metaformosis nos relata la leyenda de  Narciso y Eco. Narciso es un bello muchacho, pretendido tanto por hombres como por mujeres, y entre la cuales está la ninfa Eco. Eco es castigada por Hera a repetir las últimas palabras que oía siéndole muy difícil expresar sus sentimientos, no le puede decir a Narciso lo que siente por él.
Eco y Narciso de John William Waterhouse

Un día, estando  Narciso  de caza por el bosque, se quedó apartado de sus compañeros  y esta oportunidad fue aprovechada por Eco. Ésta hace ruidos para capaz la atención de Narciso que al oír aquello pregunta “¿Alguno está por aquí?” a lo que Eco responde“aquí”. Él se queda atónito y con su mirada busca en todas partes y  grita “Ven” a lo que ella responde “ven”. Ella sale de su escondite y se acerca a él con los abrazos abiertos en clara señal  de amor pero él la rechaza y huyé diciendo “Moriré antes de que te adueñes de mí”.
Ante tal desprecio, Eco se escondió en las cavernas,  de la mirada de los demás y se fue, poco a poco, consumiendo hasta que su cuerpo se evaporó y sólo subsistió su voz que repite las últimas palabras en las laderas de las montañas.
La ninfa Eco de Alexandre Cabanel
Narciso repitió su actitud de burla y desprecio hacia muchas otras ninfas de las montañas y una de ella gritó “¡Así como él se ha amado a sí mismo, que nunca pueda alcanzar lo que alguna vez él ame!”. Es por ello que  Némesis, la diosa de la venganza, al oír tales plegaria condenó a Narciso a enamorarse de su imagen reflejada en el agua, así el joven se ve a sí mismo en un estanque y enamorado y atraído por esa imagen y ante la  imposibilidad de separarse de ella muere ahogado en el agua. Las ninfas buscaron su cuerpo pero no lo encontraron apareciendo una flor amarilla con pétalos blancos alrededor de su cáliz, a la que todos conocemos con el nombre de narciso.
Narciso de Caravaggio
 Esta leyenda da origen a la expresión de “narcisismo” que engloba a todos aquellos que tienen excesiva admiración por su imagen, por sus facultades, por todo su ser. Se  creen pluscuamperfectos, todo un derroche de virtudes  que hace que estén tan pendientes de sí mismos que olvidan a los demás. Tienen una actitud egoísta, banal, con total falta de empatía hacia los demás que les hace cree ser el centro de atención, que todos están pendientes de ellos, de lo que hacen, de sus idas, de sus  venidas, de su ser, de su estar. Pero lo más gracioso de ello es que el común de los mortales no sabemos de su existencia. En mi vida siempre he huido de todo “narciso”, de todo aquel que se cree inmaculado,  dotado del aura de la perfección, que cree que nada tiene sentido sin él, que él es el motor de tu vida, porque en la mayoría de los casos esconden un ser acomplejado, lleno de inseguridades que proyectará contra ti haciéndote el blanco de sus críticas y agravios, que por creerse, o mejor dicho, por hacértelo  creer hará, con sus comentario y acciones sentirte inferior que él. Es por esto que prefiero un bello cardo borriquero que un atroz y mortífero narciso.
Autor: Carmen @Persefone123

"Hay que dejar la vanidad a los que no tienen otra cosa que exhibir"  
Honoré de Balzac




6 comentarios:

  1. Perséfone todo lo que escribes, tanto en el Foro como aquí es perfecto, te felicito.Te pediría algo sobre el personaje Perséfone ¿mitología? soy muy enamorada de estos temas.Gracias.

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  2. Muchas gracias por tu comentario, me alegro que te guste lo que escribo, tendré en cuenta su sugerencia.

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  3. Solo decirte que me ha encantado este escrito.

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  4. EL REFLEJO

    Cuando murió Narciso las flores de los campos quedaron desoladas y solicitaron al río gotas de agua para llorarlo.
    -¡Oh! -les respondió el río- aun cuando todas mis gotas de agua se convirtieran en lágrimas, no tendría suficientes para llorar yo mismo a Narciso: yo lo amaba.
    -¡Oh! -prosiguieron las flores de los campos- ¿cómo no ibas a amar a Narciso? Era hermoso.
    -¿Era hermoso? -preguntó el río.
    -¿Y quién mejor que tú para saberlo? -dijeron las flores-. Todos los días se inclinaba sobre tu ribazo, contemplaba en tus aguas su belleza...
    -Si yo lo amaba -respondió el río- es porque, cuando se inclinaba sobre mí, veía yo en sus ojos el reflejo de mis aguas.

    Oscar Wilde


    Amamos porque nos reconforta algo del ser amado ?.

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    1. ¿Por qué amamos? ¿Qué nos empuja a enamorarnos de aquel que nos puede hacer daño? ¿Por qué seguimos con aquellas personas que nos hieren? quizás porque nos reconforta... o porque siempre tenemos la esperanza que "cambiará" que nosotros a través del amor podemos redimir al ser amados de todos sus pecados.... pero con eso sólo conseguimos una cosa engañarnos a nosotros mismos.

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  5. Buenas ideas en una exposición perfecta, como se suele decir, una cabeza bien amueblada, eso es hablar bello para decir algo, o sea, al contrario de la mayoría de los políticos. Un saludo.

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